Consigue que tu piel se vea reforzada con antioxidantes y una mayor hidratación con un buen sérum facial que sea básicamente un multivitamínico súper cargado para la piel y multitarea para reparar y rellenar la piel en un solo paso. Deberás aplicar una fina capa por la mañana y por la noche, antes de hidratar.
Incorpora también a tu rutina una crema hidratante que tenga efecto calmante e iluminador. Aplica una cantidad del tamaño de una moneda de diez céntimos en tu rostro por la mañana y por la noche después de la aplicación del sérum. Prepárate para conseguir un brillo intenso y un tono más uniforme.
Ten siempre a mano una mascarilla purificadora que te ayude a eliminar cualquier brote. Este es el mejor tratamiento de manchas durante la noche, aunque también puedes utilizar una mascarilla purificadora como una mascarilla tradicional para eliminar las impurezas y cerrar los poros mínimo 2 veces por semana.
Asimismo, para conseguir una piel radiante es importante el paso de la exfoliación. Esta elimina las células secas, dañadas o muertas, restaurando la superficie de tu piel con un cutis lujosamente suave. Utiliza un exfoliante de acuerdo con tu tipo de piel con ingredientes suaves que revelan una piel sedosa y profundamente preparada.
Sin embargo, ten cuidado de no exfoliarte en exceso antes del gran día, ya que esto puede provocar rojeces o irritaciones. Y no empieces a experimentar con productos nuevos durante este periodo. Continúa usando lo que te funciona.