Los tratamientos de labios son un clásico en medicina estética, diseñados para remodelar, perfilar, hidratar y rejuvenecer tanto los labios como la zona peribucal. Esta área es clave, ya que aporta sensualidad y juventud al rostro. Cuando los labios están bien hidratados, simétricos y sin signos de envejecimiento, se convierten en un gran aliado estético.

Con el paso del tiempo, los labios se afinan y en la región peribucal aparecen arrugas características del envejecimiento. Estas pueden ser más o menos marcadas según factores extrínsecos (radiación solar, tabaco, alimentación) e intrínsecos (genética o herencia).

La clave de un buen resultado está en conseguir el equilibrio entre el labio superior y el inferior, logrando una armonía que realce la belleza del rostro.